Angelina es una afinadora de pianos que -a diferencia de su padre y antes su abuelo que le enseñaron el oficio- no tiene oído musical. Hace algunos meses que se plantea cambiar de sector pero le apasiona tanto la mecánica y simplicidad del piano y la libertad e ingresos de su trabajo como afinadora que no cree posible encontrar algo similar que no requiera oído musical.