Muchas veces me he preguntado cuál es la estrategia más satisfactoria, si el palo o la zanahoria, el castigo o el incentivo, en la motivación humana. Trabajábamos en clase el otro día la Teoría X – Y de Mac Gregor en la gestión empresarial, y había división de opiniones en el alumnado…. Desde la educación de los hijos hasta la declaración de la renta, todo pasa por el mismo filtro.
Llevo un tiempo leyendo sobre el Peak Oil, ese temido momento en que llegamos al cénit de la producción de petróleo y a partir del cuál nuestra civilización entrará en declive si no es capaz de adaptarse a la nueva situación. Hay artículos serios como el de Carles Riba, webs-repositorio bien trabajadas e interesantes como ésta o ésta o , otros artículos que auguran una catástrofe que dejará sólo un 10% de la población humana, para todos los gustos, vaya.
Mi opinión es que la administración y los mass media podrían y deberían ser más conscientes de el peligro que nos acecha a la vuelta de la esquina. Las predicciones pueden estar equivocadas, tal vez sí tengamos tiempo de adaptarnos, pero no está nada claro que sepamos vivir con un 20% del consumo de energía actual. Y llegar, llegará. En 10, 20 o 30 años, pero no más.
Y los gobiernos están adoptando una posición más de zanahoria que de palo. Hablan de cambio climático, de reducir las emisiones, de incremento de temperatura, de cambio de modelo, y la verdad es que convencen a poca gente porque tampoco ellos son consecuentes ni se lo creen. Lo del incremento de 1 a 5m del nivel del mar se salva con diques, lo del incremento de temperatura, con aire acondicionado,… Pero mientras afecte al “planeta” y no demasiado a nosotros, ajo y agua!
Pero qué pasaría si evidenciasen que el petróleo se está acabando? Por qué no hablan de ello? Tal vez la idea sea que si seguimos consumiendo a este ritmo o mejor lo aumentamos llegaremos -por la vía indirecta, eso sí- a frenar el cambio climático porque no habrá más emisiones -una vez acabemos con gas y carbón- pero me parece una maniobra un tanto arriesgada.
Los que defienden modelos de economía local estarán de enhorabuena. No habrá petróleo para las grandes máquinas de la agricultura intensiva, ni para trasladar sus productos de una punta a otra del planeta. No habrá petróleo para construir nuevas carreteras, ni tan sólo alquitrán para reparar las actuales. No habrá petróleo para utilizar las flamantes salinizadoras de agua de mar. Ni para generar más plástico. Ni para…
Suena extraño? Creo que es un buen ejercicio pensar cuántas de las acciones que hemos hecho esta semana no podríamos haberlas llevado a cabo sin petróleo. No es sólo la energía, sino que el petróleo está presente en el 80% de las cosas que hacemos o utilizamos. Y ya no sabemos cómo lo hacían en 1850 para vivir con tan pocos recursos, nadie nos lo enseña ya.
Tal vez sea más eficiente empezar a ilustrar cómo puede cambiar el mundo que nos rodea en 20 años debido a la escasez de energía. Esto sí que nos afectará. Las renovables claramente no pueden satisfacer la demanda actual, y la energía que necesitaríamos en 20 años para construir paneles solares, aerogeneradores, geotermia,… es mayor que la que podemos extraer ahora mismo.
Por tanto, menos invertir en campañas de TDT y más cultura del PALO que nos vamos a pegar nosotros mismos viéndolo venir con 100 años de antelación. Seremos tan necios? Será que nos puede el EGO?